domingo, 26 de diciembre de 2021

¡QUÉ BELLO ES VIVIR! LA PELÍCULA QUE SE SIGUE EMITIENDO SIN LOS SIETE MINUTOS QUE LE CENSURÓ EL FRANQUISMO

Ayer vi en un canal de tv marginal la película "Qué bello es vivir". De pronto, en una escena, cambia la voz del doblaje y me doy cuenta de que es un efecto de la censura de la dictadura franquista que consideró que podía contaminar a la sociedad española. La película sigue pasando y hay una nueva escena en la que cambian las voces porque pasó por ella la tijera intolerante del franquismo. 

En una de las escenas censuradas se ve al protagonista entregando a unos vecinos una casa construida por la cooperativa de viviendas que dirige. En la siguiente escena, también censurada, un trabajador del banco le explica a su jefe, el empresario usurero que se está adueñado de la ciudad, por qué tiene que aplastar esa cooperativa de viviendas que construye casas dignas a mitad de precio de las suyas. 

Esa escena le da a la película un contenido político muy fuerte; el contraste entre la cultura de la usura del capitalismo que no respeta derechos fundamentales como el de una vivienda digna y la posibilidad de dar una respuesta social que permite acceder a una buena casa a quienes el mercado deja en los márgenes. Borrarla era una forma de negar la posibilidad de que la sociedad articule otras respuestas sociales a un problema como ese. El capitalismo salvaje como único camino. 

Esta es una de las escenas censuradas en España.

La película original tiene una duración de 130 minutos, pero a la versión censurada, que se ha emitido en televisiones españolas en numerosas ocasiones, se faltan siete minutos que fueron amputados por el franquismo. 

En cuarentena y cinco años de democracia se siguen emitiendo películas censuradas e imprimiendo libros a los que les faltan páginas porque con el regreso de la democracia ningún Gobierno español ha creado un organismo que erradique los efectos de la censura.